La Paz, 12 jun.- La Fundación Cinemateca Boliviana cumple hoy 36 años de funcionamiento con una agenda de trabajo que incluye, entre otros aspectos, la conclusión del catastro del cine nacional, y con el objetivo de consolidar alianzas estratégicas con instituciones estatales y privadas para ampliar su cobertura a escala nacional.

La Cinemateca Boliviana inició sus actividades en 1976 por iniciativa del entonces alcalde de la ciudad de La Paz, Mario Mercado Vaca Guzmán, Amalia de Gallardo y el padre Renzo Cotta. Pedro Susz y Carlos Mesa fueron designados para su dirección.

Edificio de la Cinemate BolivianaEntonces tenía sus oficinas en una parte del colegio San Calixto (esquina Indaburo y Junín) y luego se vio forzada a buscar otro local, sin tener éxito llegando casi al cierre de sus instalaciones. Tras varias trabas gubernamentales se logró la concesión de un terreno de propiedad de la fundación Rosa Agramonte en favor de la Cinemateca Boliviana

En 1996 se contrata a la empresa CBI para que realice la construcción del nuevo edificio de la fundación y se lo entrega en 1998.

Desde su inicio, el objetivo de la Fundación Cinemateca Boliviana era el de rescatar, salvaguardar y difundir el patrimonio nacional de imágenes en movimiento.

La meta fue consolidada, pero aún falta mucho por hacer, a decir de la directora de la fundación, Mela Márquez.

“La Cinemateca Boliviana es ya una marca registrada, tiene mucho prestigio y ha logrado consolidarse como el depositario de las artes visuales y también como un centro cultural”, afirmó.

Esta cualidad de centro cultural se le otorga porque la entidad no sólo exhibe películas bolivianas y extranjeras, sino también capacita a los nuevos cineastas y documentalistas a través de seminarios, talleres y cursos que se dictan a lo largo del año.

Además, la entidad está ejecutando el proyecto Imágenes de Bolivia, que tiene la tarea de rescatar y elaborar el catastro de las obras cinematográficas y de sus productores.

El objetivo a largo plazo de la Cinemateca Boliviana es consolidar acuerdos estratégicos que le permitan ampliar su cobertura a otras regiones del país, pues en la actualidad con la Cinemateca rural se llega a más de 8.000 niños difundiendo cine boliviano y con identidad.

“También queremos consolidar alianzas con el Ministerio de Educación para que los cineastas se formen con rigor”, indicó.

DATOS

• La Cinemateca Boliviana inició sus actividades en 1976 por iniciativa del entonces alcalde de la ciudad de La Paz, Mario Mercado.

• A fines de los 90, la entidad recién cuenta con un edificio permanente, provisto de un complejo de multisalas.

• La fundación cuenta con una agenda diaria en la que presenta obras europeas, americanas y también nacionales.

• La Cinemateca rural, que es un proyecto que se ejecuta en varias zonas del país, llegó a más de 8.000 niños. (Cambio)