La Ministra Zulma Yugar, durante la inauguración de la Semana Cultural en la Unesco.París, 18 may.- Fue inaugurada el lunes en París la 'Semana Cultual-Bolivia, la Voz de la Diversidad', actividad que se inscribe dentro el marco del Tercer Festival Internacional organizado en la capital francesa por la UNESCO.

La inauguración estuvo a cargo de la directora general de la Unesco, Irina Bokova; la presidente del Consejo Ejecutivo de la Unesco, Eleonora Mitrofanova y contó también con la participación de la ministra de Culturas de Bolivia, Zulma Yúgar quien en su discurso ensalzó la diversidad cultural que posee el país andino amazónico.

Al mismo tiempo, ofreció al público asistente, una pequeña muestra de su arte musical.

Previamente a la ceremonia oficial de inauguración, el hall de la Unesco fue inundado por el sonido y los colores de dos danzas representativas de la tradición cultural boliviana: La Diablada y los Macheteros, interpretadas por danzarines de las asociaciones de bolivianos residentes en Francia.

Pasada la inauguración, tuvo lugar la realización del Tercer Festival Internacional del Charango en París, actividad que reunió a los instrumentistas bolivianos Guillermo Cuiza, Antonio Perez, Florindo Alvis y al maestro Ernesto Cavour, ícono de esta instrumentación.

Combinando virtuosismo musical, humor y poesía, el maestro Cavour fue sin ninguna duda la estrella del festival. Cuiza y Pérez, dos instrumentistas de talla, no defraudaron la expectativa del público, y el sonido particular de Alvis arrancó una larga ovación.

Pero la sorpresa de esta primera jornada cultural la dieron tres músicos originarios del Norte de Potosí, que aportaron hasta la Ciudad de las Luces, metáfora extendida mundialmente como se conoce a París, el sonido de los ayllus del suroeste andino de Bolivia.

Pascuala Porco, Nicolasa Castro y Melian Sangueza cerraron el festival poniendo de relieve la diversidad y riqueza musical que poséen las comunidades indígenas de Bolivia.

La Semana de Bolivia continuará hasta el viernes 21 con una serie de actividades entre las que se cuentan una mesa redonda sobre el Suma Qhamaña y los Desafíos para el siglo XXI, una exposición de artistas bolivianos residentes en Francia, otra de Máscaras, Tejidos y Miniaturas de Alasitas.

Se llevaran a cabo también presentaciones de danzas de distintas regiones del país, así como exposiciones de gastronomía, artesanías, turismo y libros de Bolivia.

Destaca la presencia de las ediciones alternativas Yerba Mala Cartonera, así como de la joven talento de las artes plásticas, Rosmery Mamani.

Según afirmaron varios bolivianos residentes en Francia, hacía muchos años que Bolivia no tenía una presencia cultural tan importante en París y, según resaltaron, es la primera vez en la que hay una real presencia de la cultura de los pueblos originarios.

Este esfuerzo fue posible gracias al concurso de los ministerios de Culturas y Relaciones Exteriores de Bolivia y la organización de la Embajada de Bolivia en Francia así como de la Misión Boliviana ante la Unesco.(ABI)