El Alto, 5 sep.- El delito de la trata y tráfico de personas tiene a El Alto como una de las ciudades eje, porque esta urbe se constituye en uno de los accesos para que mujeres sean llevadas al exterior, especialmente a Perú, para ser sometidas a esclavitud sexual o laboral, informó el mayor Wálter Sosa, director departamental de la Unidad de Trata y Tráfico de Personas, dependiente de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC).

Sosa explicó que El Alto no sólo es una urbe de salida, sino también de llegada de personas desde el área rural, quienes arriban en busca de una fuente laboral y debido a la informalidad caen fácilmente en las manos de redes de tratantes y proxenetas.

Jovencitas bolivianas rescatadas del Perú el mes pasado.El jefe policial afirmó que por esta razón las fuerzas del orden se organizan, junto a otras instituciones, en torno a la mesa técnica contra la violencia sexual comercial para trabajar en la prevención de este delito mediante la información hacia la población.

Esta mesa está integrada por 25 instituciones que identificaron las debilidades institucionales en la Fiscalía, las defensorías de la niñez, la Brigada de Protección a la Familia, la Policía y los operadores de justicia.

Según la División de Trata y Tráfico, hasta el primer semestre de 2011 se registraron 238 casos de desapariciones.(Cambio)