4 dic.- En vísperas de cumplir 98 años de vida y después de dedicarle, más de 7 décadas, específicamente 74 años en beneficio de la Ciudad de El Alto, el último “patricio alteño”, partió el 4 de diciembre de 2022, es decir, hace un año exactamente.
Murió como vivió, en la humildad. Sin embargo, cuando debía cumplir su misión dirigencial, hacía gala de su fortaleza, entereza y consecuencia.
Resultaba frecuente escucharle hablar de la historia de El Alto, y lo hacía como cuando uno, escucha a un locutor el relato de un partido de futbol, es decir, con emotividad, lucidez, precisión, y además con documentación en mano, parece que “veía”, el paso de los años y de las décadas, en sus apasionados testimonios
Probablemente, los atributos de fortaleza, entereza y consecuencia, antes citados; Manuel Chávez, los convirtió en características suyas, condiciones que le permitieron, dar eficiencia a los tediosos trámites para la obtención de las diferentes personerías jurídicas: de su zona (Alto Lima), de las juntas escolares de la región, de la Sub Federación de Juntas Vecinales, de la Federación Juntas Vecinales de El Alto, del Consejo Consultivo de FEJUVE jdfy con seguridad, también de la Confederación Nacional de Juntas Vecinales de Bolivia (CONALJUVE), es decir, que para todos ellos, procuró su “cédula de identidad”.
En los 98 años de vida, desde su modesto domicilio de la calle Pucarani de la Villa Ballivián, fue testigo y protagonista de los hechos más importantes o no, que ocurrieron en el proceso de construcción de esta ciudad. Nunca trabajo en las entidades estatales, aunque podía hacerlo.
Empezó su actividad dirigencial, precisamente, un 4 de diciembre de 1948, (fecha también de su partida), ocasión en que fundó Villa Alto Lima, y fue su primer presidente, nueve años después, propulsó la formación del Consejo Central de Vecinos de El Alto de La Paz, en 1957, en el que ocupó también un cargo directivo.
Posteriormente, en 1966 fundó la Sub Federación de Juntas Vecinales de El Alto de La Paz, que la dirigió por cuatro gestiones consecutivas.
Al siguiente año, gestionó junto al Sub Alcalde, la creación del Sub Tesoro Municipal en el Alto de La Paz.
Con ese cargo y su representación, participó necesariamente de la Federación de Juntas Vecinales de La Paz, donde le eligieron vicepresidente. La precipitada renuncia de su presidente Floren Sanabria, ocasionó por prelación, que él asumiera la presidencia de la FEJUVE La Paz. Concretamente, dirigió de manera simultánea, los dos entes vecinales: de La Paz y del Alto de La Paz.
Más adelante, en 1979 impulsó la creación de la Federación de Juntas Vecinales de El Alto de La Paz, del que fue presidente en dos gestiones, asimismo, participó en la creación de la Confederación de Juntas Vecinales de Bolivia en 1979, cuya Vicepresidencia la ocupó en varias gestiones, y desde 2007 hasta el día de su partida, fue presidente del Concejo Consultivo de la Federación de Juntas Vecinales de la Ciudad de El Alto.
Por medio se halla, la asunción del cargo de vice presidente en el Consejo Consultivo de la Confederación Nacional de Juntas Vecinales de Bolivia, instituido en 2012
Por esa trayectoria, que no fue cesión, ni concesión o de favor, el título honorífico de “patricio”, que le entregaron las autoridades municipales, representó un merecido reconocimiento a la infatigable labor de casi tres cuartos de siglo a esta población que, incuestionablemente, tiene una deuda con él.
Manuel Chávez Ticona, entendió perfectamente y a plenitud la definición de dirigente, es decir, aquella persona que rige, asesora y sigue paso a paso a sus vecinos. En sus venturas, desventuras, en sus gracias y desgracias, principalmente, en procura de contar con servicios básicos, para pretender vivir como exige el mundo de hoy.
Conclusión, Don Manuel Chávez Ticona, incuestionablemente, se “inmoló” a la causa.
Por: Johnny Fernández Rojas (Periodista e historiador alteño)
