Tarija, 16 jul.- El subgobernador del municipio de Yunchará, del departamento de Tarija, Eleodoro Jurado, informó el lunes que en los últimos años el ganado camélido se redujo 30% por la sequía y falta de alimentos.
"Yo creo que ha caído la producción en un 30 por ciento, debido la sequía, falta de alimentos y al frío en la zona. Bajó la producción, nosotros estábamos pasando las 18 mil cabezas, pero ahora estamos sobre las 12 mil cabezas, muchas han muerto por la sequía", informó a los periodistas.
A su juicio, se debe mantener esa producción de 12.000 cabezas, tomando en cuenta que la carne de llama es demandada por la población en los mercados de la ciudad de Tarija.
"En Yunchará por segundo año vamos a entregar charque de llama en la canasta alimentaria, tenemos mortadela de llama, estamos yendo de a poco, antes en Tarija nadie comía llama, ahora sí y es una carne de exportación, todo es un proceso", explicó.
Además, reveló que se está trabajando para introducir en el municipio de Yunchará la crianza de alpaca, otra alternativa de ingresos para los comunarios y sus familias.
El municipio de Yunchará
Yunchará es un municipio diverso en cultura y ubicado en la zona más alta de Tarija. La belleza de sus paisajes y amabilidad de su gente, contrastan con el frio viento que sopla en el lugar. Hace aproximadamente 15 años el municipio apostó por la crianza camélida, como una medida de conservación de las praderas nativas, como medida de adaptación al cambio climático y una iniciativa económica.
Las llamas no erosionan los suelos, por lo que se las considera más ecológicas; su carne, de pradera, está entre las más sanas y apetecidas del mundo por sus bajísimos niveles de colesterol; además producen fibra: lana, que se constituye en una nueva fuente de ingresos económicos para los artesanos de esta región altiplánica.
