Londres, (Agencias) 17 ago.- El australiano está refugiado desde el 19 de junio en la Embajada ecuatoriana en Londres luego de haber pedido asilo al gobierno de Rafael Correa, en un intento por evitar su extradición a Suecia, donde se le requiere por supuestos delitos sexuales que él niega.
Tras ver por televisión desde la Embajada de Ecuador en Londres, junto con funcionarios de la legación el anuncio el ministro ecuatoriano de Relaciones Exteriores, Ricardo Patiño, Assange hizo unas declaraciones públicas.
“Si bien (la decisión de) hoy representa una victoria histórica, nuestros problemas acaban de comenzar. La investigación sin precedentes de Estados Unidos contra Wikileaks debe parar”, dijo el activista que será arrestado si abandona la Embajada, pues violó las condiciones de su arresto domiciliario en el Reino Unido.
Tras la confirmación de la concesión de asilo por Quito, según fuentes de la Embajada de Ecuador, el australiano dio las gracias a “los ciudadanos ecuatorianos, a su presidente, Rafael Correa, y a su gobierno” pero advirtió que “las cosas se van a volver ahora más estresantes”.
“No fueron ni el Reino Unido ni mi país natal, Australia, los que se levantaron para protegerme de la persecución, sino una valiente nación independiente latinoamericana”, manifestó.
Assange también consideró “importante” recordar a Bradley Manning, el militar estadounidense acusado de ser fuente de Wikileaks, “que lleva detenido sin haber sido juzgado durante más de 800 días”.
“La tarea de proteger a Wikileaks, a sus empleados, sus simpatizantes y sus supuestas fuentes continúa”, agregó.
Mientras que el ministro ecuatoriano de Exteriores, Ricardo Patiño, justificó ayer la decisión de su país en el derecho internacional y al considerar que la vida de Assange corre peligro si lo entregan a Estados Unidos; Londres mostró su “decepción” e insistió en que su intención es extraditarlo a Suecia, como es su “obligación legal”.
La decisión ecuatoriana de otorgar asilo al director de Wikileaks ha desatado una crisis diplomática de proporciones y la preocupación mundial por la acción que pueda asumir Londres.
Baltasar Garzón hará frente a Londres por caso Assange
El ex juez español Baltasar Garzón, a cargo de la defensa de Julian Assange, aseguró ayer que acudirá a la justicia internacional si Gran Bretaña no le permite la salida del país al fundador de Wikileaks, después de que Ecuador le concediera el asilo diplomático.
“Lo que tiene que hacer Reino Unido es aplicar las obligaciones diplomáticas de la Convención del Refugiado y dejarle marchar dándole un salvoconducto. De lo contrario, acudiremos a la Corte Internacional de Justicia” (CIJ), dijo Garzón a la prensa española.
Ecuador anunció este jueves su decisión de conceder asilo diplomático a Assange, de 41 años, refugiado en su Embajada en Londres desde el 19 de junio tras haber agotado todos los recursos legales para evitar ser extraditado a Suecia, que lo requiere por supuestos delitos de agresión sexual que él niega.
Las autoridades británicas reafirmaron sin embargo su “obligación” de extraditarlo a Estocolmo. “Nos someteremos a esa obligación. La decisión del Gobierno ecuatoriano no cambia nada”, afirmó el Foreign Office en un comunicado.
Londres aludió asimismo a la posibilidad de revocar la inmunidad diplomática de una embajada en su territorio “para actuar y detener a Assange”, una declaración que Garzón criticó con dureza calificándola de amenaza de “invasión”.
Al concederle el asilo, el Gobierno de Ecuador dio por válidos los argumentos de Assange, quien denuncia una persecución política de varios países, especialmente Estados Unidos, debido a la publicación de cientos de miles de cables diplomáticos y documentos de Washington sobre las guerras de Irak y Afganistán.
El fundador de Wikileaks y su defensor, Baltasar Garzón, temen que Suecia no sea más que una etapa antes de un traslado a Estados Unidos para responder a eventuales acusaciones de espionaje.
“Entendemos que todo ello obedece a una intención más oculta, más perversa si se quiere, que es someter al señor Assange a un procedimiento penal en Estados Unidos, que se está adelantando en este momento, que es secreto”, había afirmado Garzón a principios de agosto durante un encuentro en Madrid con agencias de noticias internacionales. (Cambio)
