2 may.- En la capital del estaño boliviano, Huanuni (Oruro), y en medio de miles de guardatojos, dejó de existir a las 13.42 de ayer, Día Internacional de los Trabajadores, el Decreto Supremo 21060, dictado en 1985 para frenar la escalada inflacionaria y enfrentar la caída de los precios de minerales en el exterior.
La norma que sustentaba el modelo neoliberal en Bolivia, aunque debilitada con las anteriores medidas del actual Gobierno, estuvo vigente 25 años y 8 meses. El centro minero Huanuni, el yacimiento estañífero más grande de Bolivia, fue donde el presidente Evo Morales –en emotivo, histórico y concurrido acto– rubricó otro decreto que da fin al llamado “decreto maldito”.
Ante la mirada de complacencia de miles de integrantes de la familia minera, el Primer Mandatario firmó el Decreto Supremo 861 que elimina el 21060 aprobado el 29 de agosto de 1985 por el extinto presidente Víctor Paz Estenssoro, del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR).
Esta norma, como recordó el vicepresidente Álvaro García, fue más artero con el sector minero porque bajo el nombre de relocalización echó a la calle a más de 27 mil trabajadores de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol).
“Vengo, hermanos y hermanas, a firmar este decreto, a acabar y enterrar el 21060 con ustedes hermanos mineros”, afirmó Morales en el acto realizado en el coliseo cerrado del centro minero más importante del país, ubicado en la localidad del mismo nombre, de la provincia Pantaleón Dalence del departamento de Oruro.
COMISIÓN DE ALTO NIVEL
Coronado con el tradicional guardatojo, Morales recordó a los dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB) el compromiso de trabajar junto al Gobierno los proyectos de leyes que reemplazarán o modificarán las leyes de Inversiones, de Exportación, Forestal, Código de Minería, de Bancos y Entidades Financieras y otras, derivadas del Decreto Supremo 21060.
Al respecto, el artículo 2 del Decreto Supremo 861 emitido ayer señala: “Se dispone la conformación de una comisión de alto nivel entre el Órgano Ejecutivo y la COB, más otras organizaciones representativas de la sociedad civil, según corresponda el área temática a tratarse, con el objetivo de efectuar la revisión de leyes que aún respondan a los conceptos y el espíritu del Decreto Supremo 21060”.
El Decreto 861 es parte del acuerdo COB - Gobierno, firmado el 17 de abril, que dio fin a la huelga general iniciada en demanda de un aumento salarial.
“Cuando me entregaron este guardatojo y la ropa minera, un compañero dirigente del sindicato me decía: ‘ahora somos 5.001’, y cuando entregaron al compañero Vicepresidente dijeron: ‘ahora somos 5.002’, y él sudando. Muchas gracias hermanas y hermanos, seguiremos sumando nuevos mineros a la Comibol, recuperando nuestros recursos naturales en toda Bolivia, concertando, acordando con los movimientos sociales”, afirmó en alusión a que en su gobierno, en junio de 2006, se revirtió el centro minero Huanuni al Estado y luego se contrató a 5.000 trabajadores, la mayoría de ellos del sector cooperativo.
DÍA DEL TRABAJADOR
El acto, en el coliseo de Huanuni, fue matizado con números musicales, entre ellos el destacado cantautor Luis Rico, cuyas composiciones evocaron la Marcha por la Vida de miles de mineros, en agosto de 1986, exigiendo la derogatoria del 21060. Según la historia, la multitudinaria movilización que comenzó en Caracollo (Oruro) fue cercada en la población paceña de Calamarca, distante a 60 km de la ciudad de La Paz, por miles de militares con tanques y aviones.
En ese ambiente festivo y mientras en casi todas las capitales de Bolivia y el mundo se rendía homenaje al Día Internacional de los Trabajadores, Morales saludó a los miles de obreros del país. “Todos somos trabajadores, obreros, originarios, maestros, transportistas, petroleros, servidores públicos, campesinos, todos y todas, por eso vengo a rendir homenaje”, expresó ante efusivos aplausos.
“Mientras ustedes ya brindan por la sepultura del 21060 y por el 1º de Mayo, “sólo quiero decirles, hermanas hermanos, que los obreros y los originarios, los verdaderos trabajadores, los dirigentes que tienen conciencia ideológica y política y cultural no podemos ser instrumentos del capitalismo, del imperialismo, del neoliberalismo, es la obligación de todos los trabajadores, obreros y originarios”, reflexionó Morales ante los supuestos afanes de desestabilización de la COB y el pedido de revocatoria para el Vicepresidente.
INCREMENTO SALARIAL
Mientras se desataba la fiesta, los mineros de Huanuni, encabezados por sus principales dirigentes, quemaron simbólicamente el 21060 en un féretro. Ante ello, el Jefe de Estado comprometió la ampliación del coliseo como le pidió el ejecutivo del sector.
Con otro decreto leído por el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, el Gobierno estableció un incremento salarial del 10% para los trabajadores de la Empresa Minera Huanuni.
Al saludar el compromiso de los mineros de Huanuni al proceso de cambio, Morales pidió a éstos no a hacer fracasar a la empresa para no dar excusas a los neoliberales para “privatizar”.
Blindar las leyes del pueblo
El presidente Evo Morales, en el centro minero Huanuni, ubicado en la población del mismo nombre de Oruro, y en ocasión de la emisión del decreto que hace viable la anulación definitiva del decreto neoliberal 21060, planteó la necesidad de blindar las leyes del pueblo como lo hicieron los neoliberales.
“A la cabeza de la Central Obrera Boliviana tenemos la responsabilidad de acordar lo más antes posible leyes mencionadas en (...) un trabajo de día y de noche, un trabajo permanente, y una vez acordada enviar a la Asamblea Legislativa Plurinacional, y de esta manera también nosotros blindar las leyes del pueblo boliviano, como los neoliberales blindaron sus leyes para que no se las cambie fácilmente”, sostuvo.
Según Morales, desde que asumió el mando en enero de 2006, tras ganar las elecciones de diciembre con más del 50% de votación, se emitieron varios decretos que perforaron el 21060, como la estabilidad laboral y otros.
“Las leyes del 21060, o las normas o sus procedimientos que correspondían (abrogarlo) mediante decretos supremos, lo hemos hecho. Lo que faltaba eran las leyes. Ahora hemos acordado con la COB trabajar juntos en estas leyes para terminar de sepultar esa norma”, expresó.
