Sucre, 6 ago.- El presidente Evo Morales reveló el miércoles que la Agenda 2025 del Bicentenario, la primera planificación decenal en Bolivia que el miércoles celebraba los 189 años de independencia, implica la construcción de más aeropuertos, carreteras, puentes sobre los más caudalosos ríos del Amazonas, ferrocarriles y hasta de una doble vía para salvar una falla geológica en el centro del país.

En su mensaje informe a la nación, pronunciado en la ciudad de Sucre, anunció la construcción necesaria, hasta 2025, de aeropuertos internacionales, además de las ciudades de Cobija, capital del departamento Pando, y Trinidad, de Beni, en puntos intermedios en el sureño Chaco y la septentrional Amazonia bolivianos y, también, en el oriente, en el departamento Santa Cruz, el más poblado y pujante del país.

"Entre Riberalta y Guayamerín tiene que haber hacia el 2025 un buen aeropuerto internacional. Por ejemplo en la zona chaqueña, especialmente tarijeña, tiene que haber otro aeropuerto internacional, entre Yacuiba y Villa Montes", detalló en un aparte de su alocución ante la Asamblea Legislativa en la Casa de la Libertad, en la ciudad de Sucre, donde en 1825 se fundó Bolivia.

También estimó menester construir aeropuertos internacionales en la frontera boliviano brasileña y en un ex centro de confinamiento político, a 1.000 km de La Paz.

"En Puerto Suárez tiene que haber otro aeropuerto internacional. En Ramón Darío, antes mi centro de confinamiento, tiene que haber otro aeropuerto internacional al 2025", precisó al tiempo de urgir, asimismo, la construcción de un nuevo aeropuerto intercontinental cerca de la ciudad de Santa Cruz que permita operar aeronaves para 800 pasajeros.

Morales estimó de importante la construcción de sendos aeródromos en San Ignacio de Velasco (este), Cinti (sur) y Llallagua (sudoeste).

El plan de vertebración carretera de Bolivia, donde Morales ha construido en los últimos años al menos 5.000 km de carreteras pavimentadas, implica la construcción de puentes sobre los portentosos ríos amazónicos del norte y nordeste boliviano.

También el tendido de carreteras que terminen de vincular Bolivia de este a oeste y de norte a sur.

Habló de la importancia de un "tramo largo", de 500 km, de Riberalta a Rurrenabaque, en Beni, donde manifestaciones alzadas contra su decisión de construir una vía entre el nordeste y el centro del país, volaron por los aires un financiamiento de 300 millones de dólares otorgado por el gobierno de Brasil.

Dijo que el plan implica terminar de vincular las localidades bolivianas de Yacuiba y Villazón con Paraguay y Argentina.

La meta es, señaló, recorrer en coche "de Oruro o Potosí sin pasar por embarcaciones (por) camino pavimentado hasta Cobija y eso vamos a entregar el 2020. Está en nuestras manos".

Alcanzar los objetivos trazados en la Agenda 2025, entraña también "construir los puentes más grandes de Bolivia: Beni 1, entre La Paz y Beni; Beni 2, entre Beni y Pando, por el Río Madre de Dios. Ya está con plata, ya está empezando y Beni 3, entre Beni y Pando, sobre Riberalta. Está en estudio el puente más grande que va a ser sobre el (Río) Mamoré, entre Trinidad y San Ignacio de Moxos".

Agregó también un complejo de vías bioceánicas y por último habló de una solución al principal problema de la carretera principal de Bolivia, que conecta de este a oeste el país y por la que transita el grueso del comercio boliviano de ultramar, una falla geológica conocida como El Sillar.

"Hemos descuidado bastante El Sillar. Ya tengo reservados otros recursos económicos para el próximo año. Queremos meter doble vía ese tramo en El Sillar que nos traer mucho problema", sostuvo.

Por último un ferrocarril desde Uyuni, de cuyas salmueras Bolivia comienza a industrializar litio, a Argentina, Brasil y Paraguay.

"El momento que vamos a incorporar la gran industria del litio lo más importante para exportar un ferrocarril de Yacuiba a Brasil y Argentina, para abaratar los costos", agregó. (ABI)