Área Productiva y Alimentaria

Mil hectáreas (has) están en riesgo de sufrir por el tráfico de tierras en la zona del proyecto Misicuni, así como del Parque Nacional Tunari de Cochabamba, donde los “loteadores” produjeron un daño ambiental irreversible con la tala de más de 5.000 árboles.

El asesor de Gestión y Desarrollo de la Gobernación de Cochabamba, Omar Fernández, denunció el miércoles que 5.000 árboles fueron quemados con el propósito de comercializar terrenos de 300 metros.

Daño irreversible

Hasta el momento fueron afectadas 137 hectáreas (has) de las zonas del Proyecto Múltiple Misicuni y del Parque Nacional Tunari con la tala ilegal de árboles que protagonizaron traficantes de tierras.

“Entre las especies afectadas se encontraron, eucalipto de exportación, eucaliptos normales, molles y muchas más”.

Al respecto el ingeniero ambiental José Fuentes, dijo que el daño ecológico podría recién ser reparado y volver a su origen dentro de 30 años.

“Cada árbol de esta especie demora 10 años para que alcance 10 metros y vemos que en el sector se hallaron árboles de más de 30 metros de altura, además de una afectación que dobla el tamaño del área quemada”, explicó el experto.

Tras una inspección que evidenció el daño ambiental, la Gobernación de Cochabamba inició una investigación con el objetivo de frenar invasiones y avasallamientos.

“Las certificaciones de los Municipios de Quillacollo y Vinto evidenciaron que esta zona es un área agrícola-rural, ya que no llega a la mancha urbana. Además se demuestra que no se autorizó ninguna urbanización, ni fraccionamiento, menos construcción de viviendas en el lugar”, denunció Fernández.

El Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) constató que el terreno mediano fue adjudicado por la familia Wolverger y que son 137 has. (Cambio)

Pobladores tratando de frenar el incendio ocasionado por traficantes de tierras en Cochabamba.