La Paz, 25 ene.- El cadáver del presidente de la compañía estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Carlos Villegas, llegó el domingo por la noche al Hangar Presidencial del aeropuerto El Alto, donde recibió homenaje póstumo tributado por una formación de la Marina de Bolivia y donde lo esperaban el presidente Evo Morales y el vicepresidente Alvaro García Linera, constató en terreno un periodista de la ABI.

Un avión de la Fuerza Aérea Boliviana trasladó el cuerpo de Villegas, fallecido el sábado en un hospital de Santiago de Chile a causa de una enfermedad terminal.

La aeronave se posó en el Hangar Presidencial pasadas las 19h00 locales.

Seis militares cubrieron el ataúd con una bandera tricolor boliviana en una solemne ceremonia castrense y luego lo sostuvieron en andas para comenzar una procesión a la que se unieron Morales, García Linera y, entre otros, los presidentes de las cámaras de senados y diputados, José Alberto Gonzales y Gabriela Montaño respectivamente, además de autoridades militares y policiales.

El momento más estremecedor se registró cuando el padre octogenario del malogrado titular de YPFB, Justino Villegas, se acercó al ataúd ayudado por familiares, antes que el cuerpo sea introducido en una carroza.

Formado el cotejo fúnebre a los pies de la aeronave, recorrió una calle de la base de aviación militar hasta colocarse, ya convertido en procesión al son de la ejecución de boleros de caballería, hasta ponerse en la vera de una avenida de la ciudad de El Alto, vecina de La Paz.

Morales intentó reconfortar al hermano de Villegas, Hugo, y a los hijos de aquel. Adelante caminaba Justino Villegas y familiares.

En el tránsito del avión a la carroza fúnebre, trabajadores de YPFB, que formaron filas para despedir a Carlos Villegas, tomaron la posta para alzar el ataúd.

Lo propio hicieron familiares del fallecido funcionario de la administración Morales.

Una caravana de vehículos oficiales y de privados, escoltados por motocicletas de la Policía, siguió desde El Alto hasta la casa de los hijos de Villegas en la zona sur de La Paz, donde será velado hasta el lunes.

El gobierno de Morales, que deploró la muerte de Villegas como una pérdida irreparable para Bolivia, decretó duelo nacional de 72 horas sin suspensión de actividades entre lunes y miércoles.

Villegas, uno de los más prominentes gestores del proceso de cambio que vive Bolivia, recibirá los más altos honores del Estado. (ABI)

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