El presidente Evo Morales recibió el viernes el nuevo avión presidencial del Estado, Dassault Falcon 900Ex Easy de fabricación francesa, que reemplazará a la actual nave presidencial que data de 1975.La Paz, 3 jul.- Después de 34 años de vigencia de un bimotor que cumplió sobradamente su tiempo de vida medio, Bolivia renovó su avión presidencial, uno de tres turbinas de última tecnología y fabricación francesa que tras 7 horas de vuelo ininterumpido se posó el viernes por la noche en el aeropuerto El Alto, de La Paz, emplazado a casi 4.000 de altura sobre el nivel del mar.

El Consejo Nacional de Amautas y Guías Espirituales de los Andes bolivianos 'milluchó' (rociaron abluciones con inciensos y otros elementos de la parafernalia andina) y realizó una ofrenda de fuego a la aeronave, un Falcon 900 EX EASY, en la misma plataforma del aeródromo, ceremonia ancestral de la participó el presidente Evo Morales.

"Es un instrumento de trabajo", destacó el gobernante luego de revelar que la aeronave, un Sabre Liner NA, de fabricación estadounidense, en que se desplazó innumerable cantidad de veces en los últimos 5 años, sufrió 15 incidentes técnicos de diversa consideración, además de acusar "fatiga de material", lo que sentencia ya, impostergablemente, su discontinuidad.

En representación del Palacio del Eliseo, el encargado de Negocios de la Embajada de Francia en La Paz, Philipee Letreriart, puso en relieve que el fabricante tiene presencia en 70 países en 5 continentes.

"El Falcon 900 es uno de los mejores productos de la gama de aviones" del fabricante, el consorcio francés Dassault, afirmó el diplomático galo.

Letreriat subrayó que este modelo de aeronave, de tres motores con capacidad para operar a 14.000 pies de altura en condiciones normales, ha sido elegido por "muchos gobiernos" de Latinoamérica para transportar a sus autoridades.(ABI)